Patricia Milara

Del curso de formación me llevo solo cosas bonitas, me llevo unos compañeros increíbles, unos profesores que disfrutan de su trabajo y que contagian toda su energía y ánimos a los alumnos, conocimientos sobre danza que me servirán para toda la vida, y también cantidad de consejos para el futuro. En este grupo se ha formado una familia totalmente comprensiva si ocurre cualquier inconveniente y con una energía espectacular, y esa es una sensación que desearía que todo el mundo viviera. Personalmente, la formación me ha hecho crecer no solo como bailarina, a nivel técnico y a nivel expresivo, también como persona y como futura trabajadora, enseñándome a cómo enfrentarme a cualquier situación en el mercado laboral, por lo que me siento muy agradecida de ello. Sinceramente, pienso que probar esta experiencia y apuntarse a este curso es una gran idea de la que te quedarás infinidad de consejos, conocimientos, recuerdos bonitos y una gran satisfacción personal.